La Estilística
L.
Sales define la Estilística como la ciencia que se ocupa del estudio de los
medios y recursos que proporciona la lengua y su realización concreta en el
habla, como modos socialmente significativos y socialmente interpretados, de
acuerdo con su estilo particular. G. Martín Vivaldi considera que la
Estilística es la ciencia del estilo, es decir, la investigación crítica y
analítica de las principales cualidades que ha de reunir el buen estilo.
Antecedentes
El
origen de la Estilística se remontan a la retórica, se establece en los
comienzos del siglo XIX, pero no existía unanimidad por parte de los lingüistas
en cuanto a las concepciones de su objeto de estudio y sus métodos, por
ejemplo, el lingüista W. Meyer declaró en 1899 que la Estilística era el
estudio de las lenguas como arte, otros la consideraron como una disciplina
literaria, y otros como un complemento de los estudios lingüísticos que se
ocupan de la sinonimia de los medios de expresión.
No fue
hasta 1954 que P. Guiraud en La Stylistique admite la existencia de una
Estilística lingüística. Este autor fundamenta que el objetivo de la misma es
la forma de los enunciados lingüísticos, desde el punto de vista de la
selección de los medios de expresión y de su uso opcional (la selección o
elección de los medios de expresión entendida como el estilo que adopta un ser
determinado a la hora de efectuar un enunciado). Para C. Bally los hechos de
estilo están ligados al mundo del habla, lo variable en el uso de la lengua.
Esta variación la concibe como elección dentro de posibilidades de una lengua,
como posibilidad de innovación con finalidades afectivas y expresivas.
A
partir de la segunda mitad del siglo XX la Lingüística se enriqueció, pues los
lingüistas se centran en el estudio de la lengua como sistema. Surgen la
Estilística, la Sociolingüística y la Pragmática, que orientan los estudios
lingüísticos un poco más allá de la oración; utilizan la teoría del análisis
textual, que se ocupa del mensaje que transmite el emisor al receptor.
Objeto de estudio
El
objeto de estudio de la Estilística es el estilo, entendido por D. Alonso como
lo peculiar, lo diferencial de un habla. Para J. Marouzeau es la actitud del
sujeto hablante o escribiente ante el material que le ofrece la lengua, es el
modelo de utilización de los medios de expresión lingüísticos para un fin
concreto. Galperin introduce una concepción tripartita del objeto de estudio de
la Estilística: los medios expresivos, los recursos estilísticos y los estilos
funcionales. Los fenómenos objeto de estudio de la Estilística son
descriptibles a partir de categorías y reglas del léxico y la gramática, que
desde el punto de vista del texto implican la elección característica de
unidades léxicas, sintácticas y semánticas. Por tanto, el estilo es una forma
típica del uso de la lengua, un procedimiento del sistema lingüístico.
La
Estilística centra su estudio en las disímiles formas de enunciados que se
producen en el discurso, en la selección y elección que hace el emisor según la
función de la comunicación, la finalidad u objetivo de esta, el contexto; es
decir, de acuerdo con los factores estilísticos que intervienen en la
comunicación. La Estilística pone de relieve las formas lingüísticas diferentes
y las relaciones con el contexto en términos de postura, actitud, carácter y
factores sociales. Se refiere a la «adecuación» de las posturas del emisor.
El
estilo del enunciado es derivado de la selección o elección de los medios de
expresión, determinado por la naturaleza, las intenciones o situaciones del
sujeto hablante o escribiente. Pero esta selección o estilo está fijado por
factores estilísticos, que ayudan a que el enunciado tenga una mayor validez.
Cualidades del buen estilo
·
Claridad: significa expresión al
alcance de un individuo de cultura media. Esta cualidad exige pensamiento
diáfano, conceptos “bien digeridos”, exposición limpia, es decir, con sintaxis
correcta y vocabulario o léxico al alcance de la mayoría: ni preciosista ni
excesivamente técnico. Esto significa que un estilo es claro cuando el
pensamiento del que escribe penetra sin esfuerzo en la mente del lector. El
secreto de la claridad no consiste solo en que las ideas sean claras, es
preciso que la construcción de la frase responda al orden lógico-psicológico
estudiado y que las palabras no sean rebuscadas.
· Concisión: en virtud de esta
cualidad solo se emplean aquellas palabras que sean absolutamente precisas para
expresar lo que se desea. Conciso no quiere decir lacónico, sino denso. Estilo denso
es aquel en que cada línea, cada palabra o cada frase están cargadas de
sentido. Lo contrario es la vaguedad, imprecisión, el exceso de palabras, lo
que vulgarmente se dice retórica. Albalat considera que lo que es preciso
evitar es lo superfluo, la verborrea, la incorporación de ideas secundarias que
no añaden nada a la idea matriz, sino que más bien la debilitan.
· Sencillez: significa huir de lo
enrevesado, de lo artificioso, de lo complicado. La sencillez, se ha dicho, es
el sello de la verdad.
· Naturalidad:
consiste en decir naturalmente lo natural. Escribir naturalmente es procurar
que las palabras y las frases sean las propias, las que el tema exige, es huir
del rebuscamiento. Abalat sostiene que la naturalidad consiste en escribir con
la palabra propia, simple y exacta
Reglas
estilísticas
·
Primera: poner una cosa después de
otra y no mirar a los lados. Hay que escribir directamente, es superfluo todo
lo que dificulte la marcha del pensamiento escrito.
·
Segunda: No entretenerse. No
amplificar, es propio de oradores el desenvolver con prolijidad un tema. Lo que
en la oratoria es preciso, huelga en la escritura.
· Tercera: si un sustantivo necesita
de un adjetivo, no se le debe cargar con dos. El emparejamiento de adjetivos
indica esterilidad de pensamiento. Y mucho más la acumulación inmoderada.
·
Cuarta: el mayor enemigo del
estilo es la lentitud. Cuando el escritor es lento el lector se desespera.
"Entre
todo este laberinto del estilo se levanta, a nuestro entender, el vocablo
eliminación. Porque de la eliminación depende el tiempo propio de la prosa. Y
un estilo es bueno o malo, según discurra la prosa con arreglo a un tiempo o a
otro. Según sea más o menos lenta o más o menos rápida. Fluidez y rapidez:
estas dos son las condiciones esenciales del estilo, por encima de las
condiciones que preceptúan las aulas y las academias: pureza y propiedad”.
La estilística, ciencia que se encarga del estudio de la expresión ligüística.
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ResponderEliminarLa estilística? Pues su objeto de estudio es el estilo. Y sus principales cualidades que deben reunir el buen estilo pues son: la claridad, naturalidad, sencillez y concisión.
ResponderEliminarLa Estilísitica trata al signo poético en un doble sentido: atendiendo a su significante y a su significado, pudiéndose entender desde una dimensión psicologista donde la intuición desempeña un rol activo de gran importancia que viene a significar la base de los estudios estilísiticos.
ResponderEliminarLa estilística: ciencia que estudia el estilo de la expresión lingüística en general: la estilística analiza los efectos bellos y expresivos del lenguaje logrados por el empleo artístico de sus recursos.
ResponderEliminarEl escritor emplea la lengua común, pero sujeta a una voluntad de forma. Quiere esto decir que el escritor vigila atentamente su expresión para alcanzar la belleza. Para ello emplea determinados medios o recursos, denominados recursos estilísticos o literarios, pero que no son exclusivamente de este lenguaje
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